Hasta el año 1900 fue relativamente fácil comprar o vender un producto. Los cambios culturales y los avances en nuevas tecnologías a lo largo de la historia generaron nuevos canales de comunicación que van desde la imprenta a la televisión y, más recientemente, a las realidades extendidas.
Para nadie es un secreto que los seres humanos sentimos la necesidad de expresar lo que pensamos, desde la época del paleolítico superior cuando descubrimos la pintura como forma de comunicación, seguido por la imprenta. De esta forma, a medida que las tecnologías fueron avanzando del mismo modo lo hacia la demanda de productos y la competencia.
Así, para poner un orden a este proceso, se conceptualizó lo que hoy conocemos como “marketing”, una idea que ha ido mutando con el tiempo pero que parte del principio básico de comunicar mediante un mensaje las cualidades de un producto o servicio para que sea adquirido por un usuario final.
Entonces, para entender el marketing inmersivo o lo que yo llamo la quinta revolución de la comunicación es importante comprender de qué forma históricamente han evolucionado los diferentes canales y por qué hoy en día las personas demandan campañas más creativas, innovadoras y que conecten con sus ideales y creencias.
No olvides dejarme tus comentarios por aquí o en Instagram @lachicadelavr, te leo.
1. La revolución gráfica
Entre el año 1870 y 1900 el diseño gráfico y la imprenta jugaron un papel protagónico para la identidad de las marcas y su comunicación.
Los afiches o carteles contaban con diseños hechos a mano de artistas que eran influenciados por las corrientes artísticas de la época. Algunas tendencias llevaron a cometer duplicidad entre los diseños como es el famoso caso del logo de Coca-Cola y Cacaolat. Aunque, hasta la fecha no se ha decidido si esto es un plagio o no, la verdad es que existieron otras marcas con logos similares como Chevrolet, Leica y Pepsi Cola.
Sinceramente, no creo que se tratara de un plagio. En aquella época el mundo no estaba para nada globalizado, la promoción de productos y servicios se concentraba de forma local, y no es hasta 1930 cuando las empresas empezaron a competir para captar la atención de su público objetivo. Momento en el cual se empezaron a desarrollar conceptos como la identidad de marca y la orientación de venta.
2. La revolución auditiva
Con la llegada de la radio, la comunicación cambia por completo. Las calles estaban abarrotadas de carteles y muchos de los diseños habían perdido sentido por el afán de querer comunicar más de la cuenta. Así entre 1900 y 1950, no solo tenemos anuncios más largos y detallados, narrados por locutores famosos, si no que se incluye la promoción de productos a través de patrocinios y espacios publicitarios con jingles pegajosos.
Uno de los formatos con mayor éxito de la época fueron las radionovelas. En este caso los locutores que hacían muchas veces de actores o viceversa, trasladaban al oyente dentro de historias profundas utilizando la imaginación como herramienta principal para conectar con el público y convertir la emoción en una acción de compra.
3. La Revolución audiovisual 1950 a 1980
Al parecer nos supo a poco solo escuchar y, es entre 1950 a 1980 que una pequeña caja llamada televisión le permitía a miles de personas no solo oír sino ver un acontecimiento de manera simultánea, observar a sus ídolos o vivir experiencias que antes solo estaban en su imaginación.
La televisión era todo aquello que siempre soñamos, convirtiéndose en parte de nuestras vidas. Pero, ojo, esto no siempre fue así. En España, por ejemplo, para el año 1960 solo 50.000 familias contaban con un dispositivo en casa y era considerado un artículo de lujo.
Con respecto a la publicidad, la televisión no fue demasiado novedosa. Ya que básicamente lo que hizo fue adaptar los formatos de la radio a un medio audiovisual. Sin embargo, el concepto de marketing, por primera vez se vió afectado al comprender que la comunicación estaba estrechamente relacionada con las ventas.
4. Revolución Digital o marketing 2.0
Con la democratización del internet entre 1990 – 2015 el marketing vivió uno de los periodos de evolución más acelerados en todos los sentidos. En esta etapa no solo logramos tener un nuevo canal de comunicación sino que también se asentaron las bases de lo que hoy se conoce como Marketing Digital.
En este periodo de tiempo, pasamos de comunicarnos en páginas planas y de forma unidireccional, tal como se hacía con los carteles durante 1900, a crear relaciones a través de las redes sociales, blogs y foros.
Pero, ¿Por qué se convirtió Internet en un medio para las marcas?
Básicamente, por los cambios de hábitos del entorno social, la saturación publicitaria en los medios de comunicación convencionales y el poder de la opinión que le otorgó Internet a los usuarios, colocándolos en el centro de la conversación.
Este largo periodo nos hizo comprender por primera vez la importancia del branding y desaparecen por completo las 4 P’s y son sustituidas por las palabras: “valor”, “relación” y “cliente”. Aprendimos a vender a través de las redes sociales desde la experiencia al usuario y la conexión.
Marketing Inmersivo 2015 - Actualidad: La Quinta Revolución
Cuando digo que el marketing inmersivo es la evolución del marketing digital algunos colegas conservadores ponen cara de duda y terminan argumentando con frases del tipo: “no creo que eso pase porque los equipos de realidad virtual son un articulo de lujo”, si no entiendes mi punto regresa al apartado: Revolución audiovisual.
Lo que pocos saben es que tanto la realidad virtual y aumentada, los NFT o, incluso, el prostituido metaverso se están desarrollando y usándose para proyectos a gran escala desde hace más de treinta años. Solo que no es hasta 2015 que se democratizó su uso, específicamente cuando Facebook (ahora Meta) decidió adquirir una de las empresas más importantes de desarrollo de hardware VR: Oculus.
Tal y como pasó con el internet y los ordenadores en su momento las tecnologías inmersivas han ido ganando terreno. Muy especialmente en el mundo del marketing, donde convergen marcas que apuntan a públicos como los Millennials y Gen Z, un segmento de mercado crítico, acostumbrado a los videojuegos, la gamificación, pero sobre todo a las recompensas.
El impacto de las tecnologías inmersivas en el marketing y la publicidad
El marketing inmersivo plantea al mundo del marketing y la publicidad una nueva ventana que le permita contar historias sobre su cultura de forma directa, basadas en la experiencia al usuario, utilizando recursos que antes solo existían en su imaginación.
Yo siempre estaré eternamente enamorada de una campaña que creó Oreo en 2016 para el lanzamiento de sus galletas sabor a magdalena. En esta experiencia la marca propone explorar un mundo interactivo en 360º grados para descubrir cómo se ha creado este sabor único.
Quizás un video de los empleados hablando sobre los procesos de fabricación habría sido suficiente, pero trasladar al usuario a “ese” lugar donde ocurre la magia e invitarlo a comprenda el valor que hay detrás de cada galleta desde una perspectiva innovadora, entretenida y en primera persona, eso es algo que solo se puede lograr desde una conexión inmersión.
*Para disfrutar de la experiencia al 100% te recomiendo que utilices unas gafas para móvil.
Conclusiones y perspectivas futuras
Si te detienes a pensar, es normal que justo en este momento aparezca otro canal de comunicación, tal y como pasó hace cien años atrás. La saturación publicitaria en las redes sociales convencionales, la falta de creatividad en los contenidos y la expansión de los videojuegos es un fenómeno que juega un papel crucial dentro del proceso del cambio de conducta de las personas, llevándolas a desear otras alternativas menos invasivas y monótonas.
Las tecnologías inmersivas continúan conectando al usuario con la marca, pero esta vez a través de experiencias gamificadas y sistemas de recompensas, mientras lo posiciona en el centro de la narrativa, lo que se traduce en un sentido de pertenencia y en el mejor de los casos en una acción de compra inmediata como en el caso del ecommerce con realidad aumentada.
Y se que me dirás que el precio es una limitante, pero, particularmente pienso que todo dependerá de cómo plantees tu campaña de marketing inmersivo desde cero, recuerda que de la televisión y los ordenadores pensamos exactamente igual.
Recuerda que puedes dejarme tus comentarios por esta vía o en Instagram @lachicadelavr, te leo.